Hola Amigos: es conocida por todos la grave crisis que vive el ciclismo de hoy. Todo por culpa del doping y otras prácticas. Algunos, especialmente en Europa buscan cambiar éste ambiente. Regresando al ciclismo lo que merece: su sitial de privilegio que siempre ha tenido. Ante esto, muchos han vuelto la mirada inteligentemente hacia el pasado.Se añoran los viejos tiempos cuando el ciclismo era un deporte heroico. Una revisión de la esencia del ciclismo.
Hace unos días conocimos los Ciclistas Obesos (con gran alegría por cierto) la noticia de que en Italia se iba a disputar una hermosa carrera. Una carrera que evocaba viejos tiempos. Enmarcada en un escenario extraordinario como es la campiña toscana, específicamente en los "caminos blancos" de la Provincia de Siena.
Esta carrera se llama precisamente La Heroica y se corrió en la categoría Profesionales UCI 1.1 el pasado 9 de octubre.
Organizada por el pequeño club cicloturístico de Gaiole in Chianti (famoso por sus Vinos) y patrocinada por uno de los Bancos más antiguos del mundo, el Monte dei Paschi di Siena, fundado en 1472. Más importante que el resultado de la carrera es el trasfondo de ésta.Enmarcados en su lema: “se buscan las raíces autenticas de aquella extraordinaria pasión popular, que fue (y en cierto sentido lo es todavía) el ciclismo de los gigantes del camino, aquella que ha alimentado tantas legendarias leyendas”.
Este deseo lo pusieron en obra los organizadores en una carrera de 168.9 kilómetros, en un recorrido mixto de caminos asfaltados y de tierra.
Esos caminos polvorientos, llamados “Caminos Blancos” daban la sensación de estar presenciando una carrera de los años 20 o 30.¡Imagínense qué ambiente! Era una mezcla de carrera belga tipo Vuelta a Flandes y una Paris Roubaix. ¡Lo máximo para el aficionado!
La llegada fue espectacular.La línea de meta se dispuso en la Piazza del Campo, lugar donde se corre el “palio de Siena” famosa carrera pluri-centenaria a caballo. Plaza que se inflamó de la pasión y amor por el ciclismo de parte de los “Tifosos”. En aquella Plaza símbolo de la exaltación de los héroes que ganan “el Palio”, se exaltó al ciclista como exponente máximo de esa lucha frontal contra sí mismo, contra las asperezas del camino y contra el tiempo. Hombres sin límites y sin fronteras.Esta carrera, la Heroica, representó para todos los fanáticos del ciclismo una lucha más en la búsqueda sin tapujos, del alma del deporte de la bicicleta: una disciplina natural y espontánea, como lo es el sentido de libertad que nos entrega ésta, al momento de montar en dos ruedas. Un saludo y VIVA EL CICLISMO!
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